Hardware

Existen numerosas opciones para construir nuestro propio servidor doméstico, cada una con características y ventajas distintas según nuestras necesidades. A lo largo de este artículo, repasaremos las alternativas más comunes y finalmente compartiré cuál es la solución que yo he elegido.

Opciones

Para instalar el software y los elementos necesarios que componen una instalación de Home Assistant, podemos utilizar prácticamente cualquier hardware, desde un PC antiguo que tengamos por casa hasta el hardware especializado que ofrece Nabu Casa. Home Assistant es compatible con una amplia variedad de OS convencionales, lo que facilita la elección de un hardware adecuado. Encontrar los requisitos mínimos para su ejecución no debería ser un desafío.

Mi perspectiva y filosofía para el desarrollo de mi sistema domótico se centran en el mínimo consumo energético y el minimalismo, buscando reducir al máximo el impacto en el hogar. Esto implica no solo optimizar el uso de recursos, sino también minimizar factores como el ruido y el espacio ocupado, garantizando que el sistema sea eficiente, discreto y lo más integrado posible en el entorno doméstico. He optado por una Raspberry Pi 5 para mi configuración, una opción sencilla pero potente que se adapta perfectamente a mis necesidades.

Raspberry Pi

Para la orquestación de mi sistema, he elegido una Raspberry Pi 5. Es una opción fácil de adquirir y poner en marcha, lo que constituye uno de sus principales atractivos. Sin embargo, dado que va a albergar un sistema que estará funcionando de manera continua, gestionando tareas 24/7, es necesario realizar algunas modificaciones mínimas para asegurar tanto su durabilidad como su rendimiento a largo plazo.

No es una buena opción trabajar con la tarjeta SD incluida en la configuración por defecto de la Raspberry Pi, ya que a mediano o largo plazo puede generar problemas de fiabilidad y no ofrece el mejor rendimiento en términos de velocidad. Además, la disipación de calor es crucial. Mejorar la refrigeración de nuestra Raspberry Pi ayudará a mantener su temperatura bajo control, lo que a su vez, contribuirá a alargar su vida útil y garantizar un funcionamiento más estable a lo largo del tiempo.

Hardware adicional

Como he mencionado antes, para customizar mi placa he recurrido a modificar la memoria y la disipación:

• Memoria: He incorporado un módulo NVMe de memoria M2 SSD (80mm) de 256GB usando un HAT especifico para Raspberry Pi 5 diseñado para colocar nuestra memoria en la parte inferior de la placa.

• Refrigeración: He elegido un módulo de disipador + ventilador, todo en uno, para Raspberry Pi 5.

Configuración inicial

Llegados a este punto, es momento de comenzar con la configuración inicial de nuestro hardware. Para ello, vamos a revisar los aspectos clave en el comienzo de la sección de Raspberrypi.